domingo, 17 de noviembre de 2013

Beso de madrugada

Yo quiero un beso
y en tu boca encontrar el universo
colores pasteles, rojos y amores neutros,
cantidades espaciales de notas musicales,
ritmos ajenos y extraños de otros lugares
que no conocemos pero sentimos,
creemos, debimos estar en otra vida,
reencarnación mística de sentidos
lunario de movimientos lentos, rápidos
ingenuos, viendo el viento
la oscuridad,
las caricias en los cuerpos,
canciones calcinadas de fuego
transpiran nuestros sueños de pendejos,
inalcanzables y lejos.
Dame un beso de madrugada,
quiero viajar de tu boca
hasta el fin de semana
al lado tuyo, de los dibujos
y la ventana.
Lejana madrugada, nos vemos en la semana.

jueves, 7 de noviembre de 2013

Un mail

Bueno, hoy llueve, miro por la ventana y el día está perfecto para esta ocasión.
Lo único que puedo hacer en este momento es teclear
Este teclado, que tantas historias contó
Si, esto es burdo y barato ¡Pero qué me va a importar a mi! Acabo de leerte.
Sólo sé que ese tiempo de distancia, donde fuimos apartando el odio y el amor, nos sirvió a los dos.
Todo se resume a ese mail.
Un "hola", un "chau" y en tu posdata, un perdón.
Mi tiempo se detuvo por un instante
No te voy a mentir, tuve miedo.
Vi tu nombre en el listado y miré al techo, tapándome la boca.
Otra vez me estoy dispersando.
Voy a tomar otro café, voy a continuar leyendo en internet y voy a seguir.
Si, a seguir haciendo mi vida,  como si no existieras.

martes, 5 de noviembre de 2013

Un sueño más

Vos te dormís y a mi me dan ganas de besarte.
Besarte esas mejillas suaves, coloradas, esponjosas.
Las beso y me llevan a un mundo paralelo, a sueños de colores, ahí, al lado tuyo, en la cama.
Te miro con ganas de despertarte. Me aburre escribir por no poder molestarte.
Vos das vueltas, dormís mal. Tus pestañas caen como lluvía. Pido un deseo y estoy feliz  ¡La pestaña quedó en mi pulgar!
Fui a la cocina, tomé un vaso de agua y volví. Te miré unos segundos, busqué un libro y me acosté al lado tuyo.
Sos tan hermoso mientras leo algo de Lugones.
Me contagio de tu calma, se entrecierran mis ojos.
Me quedé dormida.
Desperté y no te vi.
Soñé que te miraba dormir y besaba tu rostro.
Soñé que me dormía a tu lado.
Soñé que te amaba.

Escrito en el colectivo

Qué es lo que estás mirando? mis zapatillas estan sucias porque camino en calles de barro.
Qué es lo  que te impresiona tanto? sé de Wagner y  Nietzsche  aunque estudie en escuela del estado.
Qué te hace desmerecerme? Puedo tener aún más conocimientos sobre la vida que tu libro de filosofía.
Qué es lo que te hastía? No robo y mi familia se gana la comida.
Qué es eso que nos aleja? Tus prejuicios no te dejan ver que camino con el peso de mi barrio.
Sin embargo, sé que escribirte esto no es en vano.
Puedo decirlo sin gritar, pertenezco al proletariado de esta zona humilde, donde la mitad se esfuerza y los demas se rinden.
Decimelo, que te pregunto otra vez ¿qué es lo que estás mirando? si supieras este viaje largo e inhumano, el que me da el tiempo de escribirte esto, mientras me miras desde la ventanilla de tu auto.
Esto no es resentimiento social, esto no es una suerte de comunismo barato, de la que mis hermanos del barrio se están acostumbrando... Esto es conciencia de clases, eso que te posiciona más arriba y a mi más abajo. No me tires mas, que necesito escalar, pero por mi cuenta.
Escribiendo puede que llegue, la estoy peleando... pero me falta tanto, pero tanto por andar ...